¿Por qué hacemos de lo fácil lo difícil?
¿Por qué dejamos pasar los momentos tan mágicos y brillantes que nos regala el estar vivos y solamente nos centramos en los que nos hace perder el tiempo y nuestra paciencia?
¿Por qué no nos enfrentamos a nuestros miedos para así poder vivir en paz?
¿Por qué me ha tocado tener cáncer?
¿Por qué me siento el hombre más afortunado del mundo, aún teniendo cáncer??
Todas y cada una de estas preguntas las he podido resolver durante mi lucha con el mal, con el tumor de nombre feo, muy feo.
En lo diario, nos complicamos con las cosas fáciles, nos empeñamos en buscar lo que no hay, porque no concebimos que algo sea simple, fácil, nos creemos que lo fácil tiene gato encerrado, sin disfrutar de lo que nos aporta. Los días pasan, no vuelven, y lo que dejamos atrás no lo recuperamos; mi primera moraleja ha sido el hacer lo más fácil posible mi vida, simple, sencilla, pero disfrutarla al cien por cien.
Nos nublamos, nos cegamos, nos enmudecemos ante pequeñas cosas sin ver lo que hay alrededor nuestra, sin sentir la magia de la vida. Nos hemos convertidos en robots, nos levantamos, desayunamos, trabajamos, comemos, dormimos, pero no nos detenemos a disfrutar; lo bueno de la vida no tiene etiqueta ni precio, no desgrava, pero renta mucho, nos garantiza ser libres, sin ataduras, nos da paz, nos convierte en seres magníficos y el día en el que se nos apague la luz, haremos un balance, y tenemos dos opciones, pensar que hemos desperdiciado el tiempo, o sentir que hemos sido realmente felices, que hemos hecho feliz a los nuestros y viceversa. Yo elijo la segunda opción, hoy por hoy soy una persona feliz, muy feliz.
Pocas veces me he preguntado el por qué tengo cáncer, por qué yo. No he encontrado respuesta, y finalmente he dado por hecho que me tenía que tocar a mí. La vida me ha dado un toque de atención, haciéndome vulnerable por un tiempo y saber salir airoso de los obstáculos que tenemos. Cuando acepté que tenía lo que tenía, decidí tomármelo como un regalo, porque ha sido más momentos buenos que malos los que me ha aportado. Aún así, no me lo cuestiono mucho, porque no hay respuestas para ello, o no las encuentro. Que un puñado de proteínas se hayan querido instalar en mi clavícula y trincharse, pues ahí estoy yo para luchar contra ellas. Lo mejor, el ejército que me acompaña, cada día más numeroso, cada día más fuerte, y sobretodo, cada día me siento más orgulloso de toda la gente que tengo.
Con todo lo anterior, ¿cómo es posible no sentirse el hombre más afortunado del mundo? El cáncer ha acondicionado mi vida, pero no la centra. No con todo ello quiero decir que el cáncer sea algo benévolo, todo lo contrario, pero todo tiene sus dos partes, la buena y la mala. La parte negativa de un cáncer de sobra es conocida, pero la positiva no se ha explorado, bueno, yo sí, me he sentido explorador para buscar lo bueno, y lo he encontrado. En todo este tiempo, he sido capaz de amar más, disfrutar más, reír más; me he reencontrado con tanta gente que creí haber perdido, he podido notar que importo a más gente de la que pensaba, me miman y me quieren, qué más puedo pedir.
Esto pasará, me curaré, pero jamás olvidaré lo que fui y lo que soy, ha sido mi universidad este periodo de tiempo, y estoy seguro que marcará mi sino en la vida.
Aparcamos nuestros miedos y los enmascaramos, para evitar enfrentarnos a ellos, pero en el día a día nos acordamos de ellos, dejando que la vida se esfume. Hay que plantarle cara, ser fuertes, que lo somos, aunque creamos lo contrario. A mí me dicen hace un año y medio que iba a pasar por todo lo que he pasado, y me hubiera muerto de un patatús, y mira por donde aquí estoy vivo, y lo más importante, feliz, muy feliz. Actualmente aún tengo algún que otro miedo, sobretodo por mis hijos, pero poco a poco los voy venciendo.
4 comentarios:
QUE RAZON TIENES, Y QUE PENA QUE NO TODOS PODEMOS VER EL MUNDO CON TUS OJOS , POR FAVOR NO DEJES DE DARNOS TORTAS DE CONCIENCIA Y MANTENERNOS DESPIERTOS,.
UN ABRAZO,
Hola llegue aquí por casualidad, yo soy de Bogotá Colombia, tengo 23 años y estoy viviendo algo parecido a lo tuyo, también tengo un blog y me sorprende la similitud de los temas q tocamos creo q cambia la forma mas no el fondo... estás cosas si q nos cambian la forma de ver la vida. mi tumor tiene irónicamente un nombre astral. y además butterfly de mariah es la canción q escucho cuando siento que quiero salir volando y dejar esto por un ratico y sentir q todo es un sueño extraño no malo...
Bueno un gran abrazo de solidaridad y fuerza.. somos unos guerreros.
Te deseo lo mejor
Ainda bem que estás de bem com a vida, eu ainda não consegui assimilar, por vezes penso que estive a sonhar:(
Também o meu maior medo é deixar as minhas filhas sós.
Força e bom 2009.
Sandra
Boa noite de reis, que estes te tragam tudo de bom:)
Publicar un comentario