Desde que nacemos tenemos nuestras pautas marcadas, bien por nuestros padres, bien por nuestro entorno o bien porque así lo dicta el manual del recién nacido. Nos enseñan a comer, a vestirnos, a atarnos los cordones, nos enseñan lo que está bien y lo que está mal (aunque hay alguna especie que no lo distinga). Nos enseñan a hablar, a jugar y a caminar. Seremos más guapos o más feos, más altos o más bajos, más flacos o más gordos, pero todos somos iguales. Todos jugamos en la playa, en el parque, con coches o muñecas, nos relacionamos con otros niños y danzamos en la niñez.
.Pero hay gente especial, que desde niños se convierten en soles, soles especiales. Son soles que brillan como ningún otro niño brilla, son personitas que la vida les hace ser diferentes por muchos aspectos, a todos les marca un mismo objetivo, luchar desde pequeños contra un enemigo de nombre feo. Conforme pasa el tiempo se van dando cuenta que no son como los demás niños; visitan más al médico que otros, les pinchan más que a otros niños y toman más jarabes que otros niños. Como dice el refrán, son pequeños pero no tontos, y qué cierto es.
.Son soles que su energía es más fuerte que la de cualquier astro rey, son seres que acentúan su capacidad de lucha, son seres que valoran cada rato de juego más que los demás. La vida les pone a prueba, y su capacidad de superación es asombrosa. Y como humanos que son, tienen días que no les apetece sonreír, días que se convierten en eclipses, porque tienen el derecho a enfurecerse con la vida, más que nadie. Son personas tan especiales que hacen sentir a uno cuando los trata tan pequeñitos y ellos tan grandes... Porque lo son, son pequeños guerreros.
.
Estos pequeños soles son especiales, pero sus padres no se quedan atrás. Luchan como fieras, más que cualquier soldado de las tropas napoleónicas; sufren tanto por mirar a su alrededor y ver que todo se les queda grande ante esta guerra, lloran a escondidas para no dar señales de preocupación. Es difícil esbozar una sonrisa ante una lucha así. El cuerpo humano tiene una batería de sufrimiento que cuando se agota casi estalla. Pero hay que recargarla, no dejen de sonreír nunca, aunque la vida te de motivos para no hacerlo, porque esos soles que os han regalado se lo merece. Cargaros de positivismo, así podréis transmitirlo, haced que esta experiencia os enriquezca como personas, y ese sol, cuando sea mayor y mire hacia atrás, recordará que ha tenido a los mejores padres del mundo, que tanto se han preocupado y tanto han luchado por conseguir su cura.
.
La vida os ha sorprendido con una lucha par ala que no se está preparado. No se estudia en el colegio o en la universidad qué hacer ante esto. Es muy fácil decir que los padres tenemos un sexto sentido para nuestros hijos, pero eso no sirve. Lo único que podemos hacer es luchar con ellos, hacerles de la lucha un juego en el que van a aprender unos valores muy especiales. Hay que ser fuertes psicológicamente, y si no se estuviera así, estaría bien buscar un buen profesional que aporte esa fortaleza que falta. Rodearse de gente que nos quiere, que hacen que esa lucha sea más llevadera. Llorar no es malo, es un desahogo para nuestro corazón y así echar fuera lo malo que no queremos retener.
.
Esos soles de los que hablo serán capaces de, aunque sean muy pequeñitos, enseñarnos una lección: LA MAGIA EXISTE.
.
Dedicado con todo mi corazón a RAÚL Y SUS PADRES, y a TODO EL REINADO DE LA REINA LOU.
12 comentarios:
Muchas gracias Carlos. De corazón. La energía no se crea ni se destruye, se transforma o se transmite, tal y como tú lo haces. Hoy no ha sido un mal día del todo, y eso que lo hemos empezado conuna visita al hospi. Las toses nocturnas han sido de órdago. Pero ahora está contento y yo con eso me conformo. Mañana será otro día.
No sé quien es Raúl, del que hablas, me gustaría saber si tiene un blog para poder visitarlo.
Gracias de nuevo y besos.
Lou
Maravillosa forma de expresarlo.
Mucho ánimo a los nombrados y a todos esos grandes luchadores que están repartidos por el mundo y hacen que veamos de este mundo incierto, algo mejor con solo verlos sonreir.
Queridísima amiga Lou.
Raúl es el hijo de unos amigos nuestros de Coín, que con meses le detectaron un tumor cerebral. Se sometió a una operación a vida o muerte, y les dijeron a los padres que su futuro estaría marcado por las limitaciones. Pero gracias al ahinco de esos padres y a unos buenos profesionales, Raúl anda, habla, y hace una vida prácticamente normal, cosa que no pensaban cuando lo iban a intervenir. Es un niño feliz, a pesar de que está constantemente de médicos, de logopedas, de fisioterapeutas, etc...
Esevalorquenoseve, muchísimo ánimo para ti también. Siempre digo que somos los enfermos los que tenemos la postura más fácil, pues lo complicado lo tienen los que están a nuestro alrededor, teniendo que contenerse en más de una y dos ocasiones. Ya me irás contando un poco tu historia.
Abrazos
CARLOS,
NADIE NOS ENSEÑA A SER PADRES, PERO MUCHO MENOS A ACEPTAR ESTA ENFERMEDAD EN EN NUESTROS HIJOS,
PERO QUE ESTOS SOLES ENSEÑAN?
EN VERDAD QUE SI, ELLOS EMPUJAN SIEMPRE, Y A VECES SON LOS QUE NOS AYUDAN A SEGUIR EMPUJANDO EL CARRO DE LA VIDA,
BESOTES.
Olá Carlos
Gostei muito do teu texto.
Fico feliz pelo sucesso do Raúl.
Os milagres também acontecem!
No meu hospital não tem pediatria oncologica e fico feliz por isso, por parte-me o coração ver aqueles pequenos seres já a sofrer:(
Nem gosto de pensar o que os pais devem sentir quando se deparam com uma doença dessas. Vade de retro! grrr maldita doença!
Espero que esteja tudo bem contigo.
jokas
Gracias amigo por tu blog. Yo tambien soy blogero y tengo a un familiar muy muy cercano atravesando esta enfermedad. Blog como el tuyo son necesarios para que de una vez por todas se acabe con el tabú de la palabra cáncer
http://vctoryanes.blogspot.com/
Buenas tardes.
Ante todo felicidades por su forma de expresar y compartir con los demás su experiencia.
Me permito remitirle una dirección, es de alguien que forma parte de nuestra felicidad y que esta pasando por algo en lo que creo usted tiene experiencia, le agradecería que le echara un vistazo y si lo estima oportuno y cree que le puede ayudar en algo, que se lo trasmita por el mismo medio que yo hoy me permito hacer.
Toda la suerte del mundo y Gracias.
http://manujurama.blogspot.com/
Olá
Desejo um Feliz Natal na companhia de quem mais amas e um ano novo cheio de saúde e alegria:)
jokas
DA TANTO CORAJE CUANDO TE ENCUENTRAS CON ESTOS PEQUITOS QUE SE ENFRENTAN A ESE DE NOMBRE FEO, PERO A LA VEZ TE ENSEÑAN BASTANTE Y SOBRE TODO TE ENSEÑAN QUE LA MAGIA EXISTE Y QUE NADA ES IMPOSIBLE.
UN ABRAZO
TE INVITO A PASAR POR MI BLOG, (http://vslnh.blogspot.com/ ) RECIEN ACABO DE COMENZAR A LEERTE Y ME HA ENCANTADO COMO ESCRIBES, SOMOS COMPAÑEROS DE LUCHA.
Al principio, cuando a Manu (mi marido)le diagnósticaron un cáncer, me vinieron sentimientos de ira y me preguntaba por qué estas cosas sólo le pasan a los niños, a las buenas personas, y no es que desee el mal a nadie, ni siquiera a los etarras, asesinos...No, simplemente me daba rabia, podía darle a un violador y asi evitar futuras "violaciones"...
Pero siendo realistas, las cosas son como son y nada se gana pensando de esa forma y además, no creo que un etarra tuviera tanta solidaridad como la que tenemos esta gran familia de afectados, al menos nos podemos consolar, no porque haya más afectados, sino porque cada cosa que contais nos sirve a todos y algo muy importante que me has dicho hoy Carlos "lA CURACIÓN EMPIEZA POR LA CABEZA" yo añado EN LA LUCHA NO EXISTE EL FRACASO.
UN SALUDO A TOD@S Y
MUCHA ENERGÍA, DE LA QUE HACE FALTA....
Los niños tienen una fuerza especial, diferente a la de los adultos. Es muy injusto, como dice DOria, pues podria darle a un violador u a otros individuos no merecedores ni del aire que respiran. Pero la vida es así de injusta. Yo sufrí abusos sexuales en mi infancia y vivo con las múltiples secuelas que ello conlleva, pero ahora que soy madre de tres niños, sinceramente y con la mano en el corazón, te digo que prefiero mil veces volver a pasar por los abusos a que mis hijos tengan cualquier enfermedad grave.
Los niños no merecen sufrir, con nada, ni enfermedades, ni daños físicos o psíquicos, ni abusos de ningún tipo. Los niños son ángeles, merecen una vida entre algodones y risas, amor y cariño, sin vislumbrar nunca ni un atisbo de sufrimiento. Así debería ser.
Publicar un comentario